El Gobierno Territorial Autónomo de la Nación Wampís (GTANW) y la plataforma PUINAMUDT enviaron sus contribuciones para el informe de la ONU sobre la situación de los pueblos indígenas y los cumplimientos y/o faltas de los Estados para su atención en el marco de la pandemia.
GTANW, 19/06/20.- En respuesta a la convocatoria del Relator Especial de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, Francisco Cali, El GTANW y PUINAMUDT hicieron entrega de sus contribuciones para el informe que su oficina desarrollará sobre la situación de los pueblos indígenas y los alcances de las medidas de atención de los Estados durante la pandemia por COVID-19.
En el documento entregado, las instituciones indígenas que representan a los pueblos amazónicos Wampís (GTANW), Achuar (FECONACOR), Kichwa (OPIKAFPE), Quechua (FEDIQUEP), y Kukama y Uranina (ACODECOSPAT), indicaron que, desde decretada la emergencia, fueron los pueblos indígenas quienes establecieron sus propias medidas de seguridad para evitar la llegada y propagación del virus Sars-Cov-2.

En el documento, las instituciones indígenas resaltaron que recién el 30 de mayo, 11 semanas después de decretada la emergencia nacional, el gobierno peruano implementó la variable étnica para el conteo de casos positivos, y que a pesar de que el 25 de mayo se aprobó el “Plan de Intervención de Salud para comunidades Indígenas y centro poblados rurales de la amazonía peruana frente a la emergencia del COVID-19”, los 88 millones designados para su implementación aún no han sido puestos a disposición del Ministerio de Salud.
Por otro lado, las instituciones indígenas denunciaron que la propagación del virus en sus territorios, en el caso del pueblo Achuar del Corrientes y del pueblo Kukama del Marañón, se debió a la falta de pertinencia cultural de los protocolos de seguridad establecidos por el gobierno para hacer llegar la ayuda humanitaria. Ello, a pesar de que las organizaciones indígenas de PUINAMUDT hicieron llegar su propuesta de un mejor protocolo de bioseguridad de acuerdo a la realidad indígena amazónica.
A su vez, las instituciones indígenas resaltaron el factor de riesgo que representa la presencia de las empresas petroleras en sus territorios. En el caso de la Nación Wampís, mencionaron la denuncia en vías de prevención del delito interpuesta por el GTANW contra la empresa Geopark por poner en riesgo la salud de la población y por incumplir con la normativa decretada por el mismo Gobierno Peruano durante la emergencia. Por su lado, PUINAMUDT denunció la falta de atención, tanto sanitaria como ambiental, frente a cinco derrames petroleros ocurridos durante la pandemia.
Las instituciones indígenas esperan que el informe del Ralator Cali recoja sus observaciones, demandas y propuestas, y que desde las Naciones Unidas exhorten al Gobierno Peruano a respetar los derechos a la salud y a la vida de las poblaciones indígenas.
Puede leer las contribuciones a continuación:
Contribuciones-de-la-Nación-Wampis-y-PUINAMUDT-a-Informe-de-Relatoria-Derechos-Indigenas-