Se abordaron los temas del rechazo de la Nación Wampís al Lote 64 y a la categorización del cerro Kampankiás por SERNANP.
GTANW 16/12/21.- El pamuka ayatke (vicepresidente) del Gobierno Territorial Autónomo de la Nación Wampís (GTANW), Galois Flores, y el secretario técnico, Shapiom Noningo, se reunieron este miércoles 15 con la presidenta de la Comisión de Pueblos Andinos Amazónicos Afrodescendientes y Ecología (CPAAAE) del Congreso de la República, Margot Palacios, para exponer sobre las problemáticas que suponen el lote 64 y la posible categorización de la cordillera Kampankiás.
Las autoridades del GTANW también compartieron algunas propuestas para dar solución a estas problemáticas, así como los planes de proyectos de desarrollo sostenible que tiene el GTANW. Por su parte, la presidenta de la CPAAAE se comprometió a coordinar acciones necesarias desde su despacho para atender las demandas de la Nación Wampís.

Sobre el Lote 64:
El lote 64 se encuentra superpuesto principalmente al territorio de la nacionalidad Achuar del Pastaza y parte del territorio Wampís, en la región Loreto. Tras la salida de Geopark del contrato de exploración y explotación del lote en julio de 2020, el gobierno de Pedro Castillo, a través del Ministerio de Energía y Minas y el Ministerio de Economía y Finanzas, aprobó, en septiembre de este año, la modificación del contrato para que Petroperú asuma el 100% de la operación del lote. Tras el anuncio, el Gobierno Territorial Autónomo de la Nación Wampís emitió un pronunciamiento reiterando su exigencia de anular de manera definitiva el lote 64 ya que “los impactos ambientales y territoriales afectan directamente la propia vida humana de quienes vivimos en dichos territorios, de modo que, en el caso de la nación Wampís, las operaciones petroleras son totalmente incompatibles y no son negociables”.
Como se recordará, el año 2020 el GTANW realizó la campaña “Atsá Geoparkka” (No a Geopark), para exigir el retiro de la empresa Geopark de su territorio durante la pandemia y reiterar su rechazo, así como el de la Federación de la Nacionalidad Achuar del Pastaza (FENAP), a las operaciones petroleras en sus territorios. Ello después de una ardua lucha de parte de ambas nacionalidades por la defensa territorial, que se consolidó con la firma de una resolución en agosto de 2018, donde reiteraron su rechazo a la industria petrolera y se comprometieron a hacerle frente de manera conjunta.
Por ello, sorprende que el presidente Pedro Castillo y sus ministros hayan tomado la decisión de aprobar la modificación de un contrato de licencia para la exploración y explotación petrolera sin tener en cuenta el rechazo histórico de las naciones originarias afectadas por él. Cabe destacar que con el retiro de Geopark, y desde la creación del lote 64 en 1995, serían seis las empresas petroleras cuyos proyectos han fracasado en dicho lote, debido en gran parte al rechazo de la población para operar.
“Históricamente el extractivismo, el petróleo, no ha significado ningún desarrollo para el país, mucho menos para las comunidades en la Amazonía. Loreto lleva 50 años de explotación petrolera. ¿Qué progreso hay? Nada”, señaló Shapiom Noningo, explicando las razones que fundamentan el rechazo de la Nación Wampís a las extractivas. “Nuestro interés es mantener nuestro esquema de vida y proteger nuestro territorio a perpetuidad”.

Sobre la cordillera Kampankias:
El territorio Wampís, ubicado en la Amazonía norte de Perú, abarca las cuencas de los ríos Kanus (río Santiago) y Kankaim (río Morona) en las regiones de Amazonas y Loreto, respectivamente. Ambas cuencas se encuentran separadas por la cordillera Kampankias, un lugar histórico y sagrado para los y las Wampís, que también constituye un foco crítico de biodiversidad. En 1999, el gobierno de Alberto Fujimori estableció, sin el consentimiento de la población Wampís, la Zona Reservada Santiago-Comaina (ZRSC) sobre la cordillera Kampankias, como categoría transitoria hacia el establecimiento de un Area Natural Protegida Estatal.
En febrero de 2021, el GTANW denunció las pretensiones del SERNANP de realizar la categorización de la ZRSC y reiteró su rechazo a la creación de un ANP en su territorio. El GTANW se opone a la categorización de la cordillera Kampankias debido a que históricamente el establecimiento de reservas comunales y ANPs han servido para despojar a las naciones originarias de sus territorios y cederlos a empresas extractivas. Además, se sabe que la conservación de esta zona ha sido posible gracias a la gobernanza territorial histórica y ancestral de los y las Wampís, por lo que el GTANW exige al Estado peruano el reconocimiento de su territorio integral.

En efecto, el territorio integral de la Nación Wampís, que abarca la cordillera, ha sido reconocido y registrado como “Territorio de Vida” o TICCA (Territorios y Áreas Conservadas por Pueblos Indígenas y Comunidades Locales) por el Centro de Monitoreo de la Conservación del Ambiente de la ONU Ambiente (UNEP-WCMC), bajo la categoría de Área Protegida No Estatal (Área Protegida por un Pueblo Indígena).
“Que el Estado nos garantice el territorio, nos apoye para seguir en el camino de cuidado. Hemos señalado en nuestra Ambición Climática Wampís los aportes que hacemos al clima y eso debe ser reconocido”, señaló Galois Flores. “Queremos y tenemos planes para proyectos de desarrollo sostenible, que no generen impactos en el medio ambiente. El Estado debe apoyarnos.”